Una princesa, un dragón y una niña mezclan sus destinos en esta historia. Magda Donato escribe con frescura y desparpajo, pero toca temas que inquietan profundamente a los niños. En este texto los personajes no se quedan atrapados en las dificultades que la trama y las circunstancias plantean, sino que avanzan y buscan soluciones en las que se mezclan el humor y los mejores sentimientos. Este cuento nos susurra al oído: en un tiempo en que los héroes de antes se acabaron, todavía es posible cambiar el mundo y hacerlo mejor con las armas de la bondad y la gentileza.