Entonces, si nos damos cuenta en el carácter técnico del tiempo, donde acontece el imperio del presidente en su circularidad y desde la cual no podemos salir; lo que está en juego es un problema de normalización, de regla, de figuración y dominación de lo humano. Lo propio del hombre su casa- se figura, se norma de un modo presente que nos acecha y nos agobia. Esa es la eco-nomía entendida de modo técnico. Y ante esta economía estamos siendo desde nuestro horizonte vital. De allí todas las formas de explotación del hombre por el hombre; de lobos contra lobos. Por esta razón, el imperio de la economía financiera y su voraz instinto de devorárselo todo: ¡caen países pero jamás un banco! Este excelente libro, en definitiva, nos deja completamente absortos en lo que nos pasa, y nos permite ver de otra manera la ideología en la que estamos habitando. Nos indica, a veces de forma tímida, una simple luz por donde salir de siglos de encierro y laberinto. Esa luz seria un tiempo que ya no es, ni quiere ser, circular. Ricardo Espinoza Lolas