Hay en este poemario una expresión desnuda y es esa condición
su ventaja. José Javier Villarreal afirma que el lenguaje
poético le otorga al lenguaje una personalidad, le regresa
su sentido mágico, religioso y sentimental que conlleva la
apropiación, no de lo nombrado, sino de nosotros a través
de lo nombrado. En la poesía de Gabriela Turner Saad se
cumple esta reflexión.