Esta historia empezó con una sopa: un señor se comió una, de murciélago, y ahora se receta distancia y cuarentena. El mundo se ha volcado entre el pánico, la ciencia, el escepticismo y la distopía que ha provocado el nuevo coronavirus. Grandes pensadores contemporáneos han publicado en sitios digitales sus propias reflexiones sobre la pandemia y los efectos que tendrá. Algunos de éstos terminaron compilados en una antología, Sopa de Wuhan, cuya portada apareció por primera vez en el Instagram de Pablo Amador, un diseñador editorial argentino que hizo la versión en digital, traducida al español y completamente gratuita