La tierra en el futuro no es un buen lugar para vivir, por eso el máximo gobernante que tiraniza a sus pobladores pretende ejecutar un plan de invación al planeta Mardún, donde, al parecer, las condiciones son más favorables. Para ello, envía una comisión de hábiles ejecutores, a fin de explorar el ambiente y dar cuenta de la situación en la que se encuentra, valiéndose de la avanzada tecnología que poseen: teletransportadores, equipo de invisibilidad. Sin embargo, cuando el responsable de esta comisión se famirializa con los habitantes de dicho planeta, que resultan más bien amigables y pacíficos, advierte del peligro que podrían recorrer los mardunenses a manos de los terrícolas, prepara una contraofensiva para evitar y echar por tierra dicha invasión. Con un lenguaje sencillo y directo, el autor nos introduce en un escenario conflictivo en el que las emociones humanas con las acciones de diverso calibre, dentro de una desoladora visión futurista.