Estos tres últimos lustros de su vida son años de un amplio reconocimiento internacional,en especial en Alemania, donde reside largas temporadas. En España fundó el Instituto de Humanidades, como proyecto para elevar la decaída vida intelectual española. Es también la etapa culminante de su pensamiento, en la que destacan s u empeño por una reforma de la filosofía, al hilo del cuál surgen textos de la importancia de "Apuntos sobre el pensamiento, su teurgia y su demiurgia", "Prólogo a Historia de la filosofía de Émile Bréhier" o "Framentos de Orgen de la filosofía", y la reflexión sobre el futuro de Europa en los difíciles años de la posguerra, plasmada en Cultura europea y pueblos europeos, libro que se ofrece por primera vez en castellano en su integridad y forma original.