Sanchiu, de Dina Ananco, instala la cultura wampis en el panorama de la poesía peruana.
Se trata de una voz poética que escapa del ritual para situar en primer plano las
vivencias, la memoria actualizada, sus dioses y sus espíritus. Estructura directa de
imágenes sucesivas y _uidas, río-bosque-comunidad-mujer, que se percibe en la
lengua replicando un tono que interpela y que, por momentos, parodia la vida moderna
pienso en Atumsha urukarmetsu/No sé ustedes. Al _nal, es eso, palabra tierna
y luchadora Wampis nuwa asam/ Awarun nuwa asam (porque eres mujer wampis/
porque eres mujer awajun). Este poemario escrito en lengua wampis es palabra
transgresora que azota al castellano. Sanchiu, cuestiona, o mejor, reubica la función
del tradicional anen y nampet; revela el acto poético como esencia sanadora o canto
ritual; es verso donde el pueblo wampis se expresa con sencillez compleja, evocando
el mito y la vida actual; por ello es poesía dadora: Pujutnasha itamainitjai wi wakerakun
(Puedo dar la vida cuando quiero). Un poemario con río, bosque y mito, como golpe:
tierno y batallador.
Gonzalo Espino