El teatro representado en pequeñas salas y otros espacios vive en los últimos años un signi?cativo auge. Probablemente nunca existieron en nuestro entorno tantos grupos de aficionados y colectivos de diverso género, así como de profesionales que dedican parte de su tiempo a diseñar y poner en escena obras teatrales que harán las delicias de sus familiares, amigos o del público en general. Y, lo que es más importante, de ellos mismos mientras las ensayan.Durante años, Vicente Marco ha impartido talleres de dramaturgia para mayores en la universidad senior, para adultos en escuelas de teatro y para niños en bibliotecas, fundaciones o institutos. Ha impulsado la creación, algo indispensable en todas las edades, pues es nuestro mejor mecanismo de supervivencia: robustecer el ingenio nos permite no solo divertirnos inventando escenas, situaciones, historias, sino afrontar las situaciones con las que lidiamos en la vida diaria. El papel es el mejor campo de entrenamiento para desarrollar las funciones ejecutivas, tramar historias es practicar la toma de decisiones a las que nos vemos abocados en nuestro deambular cotidiano.
